Music

Con la maestría que solo despliegan las grandes cineastas, la nueva película de Schanelec propone una narración con saltos temporales y con exigentes saltos de fe. Dentro de un pesebre en las montañas griegas, el pequeño Jon fue abandonado y adoptado por una familia local. Ya siendo adulto, es encarcelado y conoce a las que serán sus dos pasiones: la joven Iro y la música. El recorrido por cada instante en la vida de Jon podría verse como un viaje a un mundo que tiende a desaparecer, con melodías, ritmos y personajes reales. Pero hablar de lo real ante una de las directoras que aún se toman el trabajo de reflexionar sobre la ficción y sobre las zonas ya transitadas por el cine es un sacrilegio. Recurriendo a elipsis y abstracciones, Music plantea una mirada de la Historia, de los mitos y de las tragedias repleta de complejidades, reflexionando sobre las posibilidades del cine y de su propio arte.